ASFALTO
* Incontrolable Crecimiento de
la Prostitución en la Capital
Por MANUEL MAGAÑA CONTRERASA un ritmo superior al 20% anual se incrementa la prostitución callejera en el Distrito Federal. En contraste, no existe a la fecha una solución para dar salida a tan grave problema derivado, según refiere “La Malinche”, dirigente de mujeres que se dedican a ejercer el oficio más antiguo del mundo”, en el amplio perímetro de la calzada de Tlalpan.
La Asamblea Legislativa señala que ya se realizan los estudios correspondientes “para crear un reglamento”, lo cual, de acuerdo a los compromisos de México y las Naciones Unidas, en el sentido de que no debe haber “ghettos” para marginar a las vendedoras de amor y reducirlas a un lugar determinado.
Según datos de la líder de prostitutas, conocida como “Ruth”, en el Distrito Federal debe haber, en la vía pública, más de 200,000 mujeres diseminadas en zonas residenciales, colonias, barrios y pueblos. El problema, dice, no es fácil de resolver porque “hay vecinos que ya están cansados de nuestra presencia, principalmente en la colonia Benito Juárez, por donde atraviesa la calzada de Tlalpan”.
Recientemente, la Coordinación Metropolitana, dependencia encargada de coordinar la solución a las demandas ciudadanas tanto en el D. F., como en los municipios conurbados mexiquenses, señaló que se había pensado en la construcción de una gran “zona roja” por el rumbo de Atenco, donde se iba a construir el nuevo aeropuerto internacional de la Ciudad de México, pero el proyecto no ha podido aterrizar, según Armando Morales, vocero de esa institución.
El tiempo corre y la solución no se da. Lo que ahora propone la Asamblea Legislativa no se ve factible, porque depende de la voluntad ciudadana y los vecinos no están dispuestos a
ceder a determinados intereses para que las prostitutas se “legalicen” por las autoridades, frente a sus domicilios.
El tiempo corre y en tanto, aumenta el número de mujeres que salen a la vía pública a ofrecer sus caricias a los clientes. El creciente desempleo motiva que las damiselas se multipliquen por todos los rumbos.
La líder de las prostitutas de La Merced, conocida como “Alicia”, dice que ante la proliferación de un número cada vez mayor de madres solteras urgidas de ingresos, en la capital mexicana ya existen varias “zonas de tolerancia” que se encuentran abarrotadas de vendedoras de caricias, entre ellas, Anillo de Circunvalación, calzada de Tlalpan, desde el Viaducto Piedad hasta Ciudad Jardín, la avenida Insurgentes, principalmente en el perímetro que corresponde a la delegación Benito Juárez, la avenida Sullivan, entre las colonias Cuauhtémoc y San Rafael; la avenida Revolución a la altura de Mixcoac.
A la vez, en los alrededores de la Alameda Central, el comercio carnal se ha incrementado.
En la calle de Santa Veracruz, donde antaño floreció esa “industria”, la historia tiende a repetirse.
Según el vocero de la Coordinación Metropolitana, entre los municipios mexiquenses con mayores problemas en materia de prostitución callejera se encuentran: Ecatepec, Neza, Tlalnepantla, Cuautitlán, Naucalpan y varios más.
La Organización de las Naciones Unidas, según las fuentes informativas que citamos, es el principal obstáculo para que se pueda crear en la Zona Metropolitana, una “Ciudad del Pecado”, donde, con todas las reservas y las garantías del caso, pudieran darse cita quienes deseen pasar momentos íntimos con la dama que ellos escojan.
De acuerdo a la experiencia de medio siglo a la fecha, en que se adquirieron compromisos con la ONU para la no creación de “guetos” destinados a mujeres de la vida galante, la prostitución callejera se agrava paulatinamente.
Tal vez para lograr que dichos compromisos con la ONU sufran los cambios que permita reglamentar la prostitución callejera, lo primero a hacer será ponerse de acuerdo con ese organismo que suele disponer la aplicación de disposiciones que no consideran la realidad.
En zonas residenciales como Polanco, en pleno Distrito Federal, la prostitución callejera ya está ocupando más espacios de los aconsejables, sería del todo conveniente que las autoridades metropolitanas tracen planes realistas, a fin de dar salida al problema de la prostitución que amenaza con invadir cada día mayores espacios, en caso de no encontrarse una salida práctica que genere tranquilidad para la sociedad.
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